Mejor uso de recursos y mayor productividad agrícola: dos pilares para la reactivación de Junín

En este segundo foro organizado por el IPE, expertos discutieron los avances, desafíos y pasos a seguir para la región de Junín y el país.
11 de marzo de 2021.- Durante el primer día del “II Foro de Desarrollo Económico Regional Junín 2021”, que se dio de forma virtual, se habló sobre los retos que enfrenta el país y esta región. Participaron Miguel Castilla, exministro de Economía y director de Videnza Consultores; Pedro Parco, director del Centro Especializado de Investigación de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional del Centro del Perú (UNCP); y Diego Macera, gerente general del IPE.
Miguel Castilla inició la charla dando una mirada general de cómo está la situación de la economía peruana rumbo al bicentenario y mencionó algunas propuestas para la reactivación económica pospandemia.
El exministro señaló que Perú es uno de los países más afectados por la pandemia en el mundo, donde las muertes por COVID-19 tienen una correlación con la tasa de crecimiento del PBI. La pandemia ha agravado las brechas de crecimiento, empleo y pobreza que, a su vez, han acentuado las diversas deficiencias del Estado.
“Estamos en una profunda crisis de desconfianza entre lo público y lo privado, entre los ciudadanos y las instituciones públicas. Todo esto dentro del preámbulo a las elecciones dentro de un mes”, indicó. Por ello, para Castilla, algunas alternativas de política para reactivar la economía son mediante la inversión en infraestructura, minería, vivienda y en nuevos sectores dinámicos.
“Hay una serie de retrasos importantes en ejecución en infraestructura (…) Hace año y medio el gobierno optó por un plan nacional de infraestructura para cerrar esa brecha, pero el estado de avance es muy bajo. De todo el plan solo se ha ejecutado 3.3% a finales del año pasado. Tomaría cuatro décadas en cumplir el cierre de esa brecha”, explicó.
Junín en tiempos de crisis
Por su parte, el Dr. Pedro Parco, director del Centro Especializado de Investigación de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional del Centro del Perú (UNCP), habló sobre el panorama económico de Junín.
“La función del estado es asignar recursos. Pero, tanto en gobiernos nacionales, regionales y locales, en términos de eficiencia, no lo están ejecutando adecuadamente”, dijo. Agregó que el PBI de su región depende del comercio (30.8%), seguido por minería (18.5%), agricultura (12.6%) y construcción (7.5%).
“A raíz de la cuarentena, prácticamente el sector minero y agropecuario se ha sentido paralizado (…). La cosecha del café fue perjudicada, porque la gente no ha podido trasladarse. Ellos dependen de la mano de obra de personas que se movilizan a otros lugares”, comentó.
Por su parte, Diego Macera, gerente general del IPE, explicó que el sector agro concentra dos quintos del total de la población económicamente activa (PEA), donde el 99% de ellos está en el sector informal.
“Cuando uno ve una de las muchas características económicas y sociales de la región, Junín es de cierto modo un buen espejo de la realidad nacional. Tiene muchas de las fortalezas y debilidades que son típicas del promedio de las regiones", analizó.
Conclusiones
Macera señaló que hay tres barreras que frenan el crecimiento de Junín: la baja productividad del sector agrícola, la eficiencia de la gestión pública subnacional y los retos en salud y educación.
“Lo que nos tiene que obsesionar es la mejora de la productividad. Todo lo demás es un camino para llegar a una mejor productividad: infraestructura, capacitación, formalización. Todos los demás temas son solo un intermediario”, recalcó.
Por su parte, el exministro de Economía concluyó que una de las prioridades del próximo gobierno debe ser la reactivación económica en el corto plazo y la recuperación del empleo, así como lograr reformas para encarar desafíos estructurales como informalidad, baja productividad, ineficiencia del gasto público y debilidades institucionales.
“La medida más importante en el cortísimo plazo es lograr un consenso mínimo de qué hacer y no ser un país de oportunidades perdidas”, concluyó Castilla.